Lámpara de pared para porches rústicos Adar

Adar: Una lámpara de pared para porches rústicos que te conecta con la naturaleza

En un pequeño pueblo, rodeado de bosques de robles y campos de calabaza, vivía un artesano llamado Kuia. Kuia era un conocido artesano creador de lámparas muy originales y naturales elaboradas con calabaza. Un día, mientras paseaba por el bosque, encontró un cuerno de vaca que se le había desprendido a una de las muchas vacas que pastaban plácidamente. El cuerno, con su forma curvada y su textura rugosa, le recordó a un pedazo de calabaza que tenia guardad en su taller.

Kuia, con su mente inquieta, pensó en utilizar ese cachito de calabaza que guardaba en su taller. Allí, con sus herramientas y su conocimiento trabajando las calabazas, lo transformó en una hermosa lampara de pared. Talló la superficie del cuerno, creando un diseño rústico y natural que reflejaba la belleza de la naturaleza.

Luego, Kuia fijó la calabaza a una base de corteza de árbol, utilizando una cuerda de yute. La corteza de árbol, con su textura áspera y sus vetas naturales, complementaba a la perfección con la forma y el color de la calabaza.

Al encender la lámpara, la luz que emanaba de la calabaza, fue cálida y acogedora. La luz tenue y anaranjada era perfecta para crear decorar e iluminar tanto un porche rústico como cualquier casa de campo rural.